CABALLERO MEDIEVAL

Salamanca (Castilla-León)

 

Comentario de la obra: 

La obra está situada de frente al acceso principal de la estación de trenes “Vialia” en la ciudad de Salamanca y fue realizada por Pedro Requejo Novoa. Se inauguró en el año 2001.

Se trata de una estatua ecuestre en cuya grupa lleva un caballero medieval ataviado con su armadura de placas propia de finales del siglo XV, con su yelmo con cimera, su espada y todo lujo de detalles. Mide 3,50 metros, pesa unos 1850 kgs de bronce y fue  fundida en Fademesa en San Fernando de Henares

El autor  la tenía bautizada como “Ay madre, qué triste vengo de amores derrotados” aun cuando se le conoce más por “Caballero medieval. La fuente de inspiración fue el título de un madrigal de Juan del Enzina "¡Ay madre que triste vengo de amores derrotado!", así que se imaginó un caballero volviendo triste y derrotado de un torneo. Es una de las pocas estatuas equestres en que el caballo desciende acompasando en su estado de ánimo al magullado caballero cuyas heridas más dolorosas son las del amor. El caballero medieval que regresa de un torneo y  vuelve derrotado en su espíritu por amoríos no correspondidos.

El caballero fue modelado íntegramente por el autor, durante cinco meses. Estaba concebido para ser colocado en un espacio más amplio y con un banco cerca desde el que observar todos los detalles. Cómo alegorías escultóricas se encuentra un cuerno roto entre las patas del caballo, cómo símbolo de la inocencia perdida por parte del caballero. En la testera del caballo aparece un hombre corpulento y musculoso con una clava en una mano, se trata de Hércules y evoca la fortaleza de ánimo.

Sobre la cimera del yelmo aparece un dragón con tres cabezas modeladas completamente diferentes una de la otra. Sobre la barda o el cubregrupa del équido está representada una estrella fugaz de dos colas que surcaba los cielos en 1997 conocido como el Hale-Boop. La armadura es de tipo alemán pues su primera figura fue elaborada en Berlín. En la peana en un lateral hay una calavera y la puso en recuerdo de un accidente muy grave de tráfico que tuvo con una furgoneta llena de material para su trabajo y del que salió ileso.

 

Agradecimientos:

- Para mi amiga  Loli Vicente   que me ha enviado las imágenes de la obra.