En la entrada del Hospital de San Juan de Dios, junto al Canal Imperial, localizamos una escultura entrañable cuyo autor desconocemos (en la trasera del pedestal encontramos grabado "Fundiciones R.Vila"

La obra está formada por dos figuras de bronce, un fraile representando al santo que abraza a un niño de puntillas que pugna por auparse.

San Juan de Dios  comienza en 1539 su labor de atención y entrega a los pobres, los enfermos y los desfavorecidos, en Granada (España). Allí utiliza, al principio, las casas de sus bienhechores para acoger a los enfermos y desfavorecidos de la ciudad. Posteriormente, organiza su primer hospital. La fama de Juan va creciendo en Granada. Acoge a todos los pobres inválidos que encuentra, a los niños huérfanos y abandonados, a las prostitutas, a los mendigos, y a todo aquel que requiere cuidados y no dispone de recursos económicos. En el lecho de muerte, en 1550, Juan entrega su herencia al arzobispo y a su sucesor Antón Martín: el Libro de las deudas y los enfermos asistidos.

La Orden Hospitalaria de San Juan de Dios, que se ha convertido, desde entonces, en una de las mayores organizaciones internacionales de cooperación sin ánimo de lucro del mundo, continúa su labor, como Instituto Religioso de Vida consagrada.

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