La idea de realizar el monumento parte de la epidemia que había sufrido esta especie arbórea en toda Europa; el hecho sirvió de inspiración al autor para concebir su obra.

El monumento , situado en el centro de un coqueto paseo de piedra rodeado de olivares, se compone de 8 olmos invertidos con sus raíces elevadas al cielo.

Al pie, una placa con una poesía del propio autor, en la que apenas podemos distinguir (por las pintadas) lo siguiente:

"Al olmo... goliat de hongo enano que hoy te abate columna y viga del hogar humano. Derrochaste poder como magnate que llega a su crepúsculo temprano. Mas aquí terminó tu vida altiva. Pensar que has de vivir aunque arriba más tiempo que hoy te planta"

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