Se trata de un monumento que se alzó en homenaje al Doctor Manuel Artero, médico de la zona que cedió los terrenos donde actualmente se asienta el centro asistencial de Atades Huesca para personas con discapacidad intelectual. El monumento fue realizado por el Arquitecto D. Eduardo Cuello e inaugurado en el año 2003.

El encargo se realiza por encargo de la Residencia de ATADES Huesca para exigir un testimonio permanente a la memoria de los bienhechores que con sus donaciones hicieron posible la construcción de la Residencia y Centro Asistencias de deficientes psíquicos.

El conjunto se compone de dos piezas escultóricas de gran formato: por una parte se realiza la composición unitaria con cuatro prismas cuadrangulares rematados por piezas curvas, una piedra compositiva única que quiere representar el árbol, símbolo de vida en nuestra cultura ancestral. En este símbolo se reconocen los principios fundacionales de ATADES, apoyados por sus benefactores: la dignidad del hombre y su vida en el mundo, referido singularmente a los más débiles y desprotegidos.

La otra pieza de la obra quiere recordar la personalidad firme, intelectual y humana de Manuel Artero, abierta al mundo y  a la trascendencia del hombre, sugerida en el conjunto por su solidez, sencilla complejidad y la apertura del hueco que encuadra la mirada a la cercana sierra de Gratal.Todo el conjunto se unifica mediante una lámina de agua, origen de la vida, que potencia la plástica formal con sus reflejos. El vaso de este estanque cuenta con una longitud de 10,50 m. y una anchura de 5 m. y está realizado en hormigón armado reforzado por una estructura perimetral de acero.

El monumento pretende de forma conceptual establecer un conjunto con carácter alegórico que represente el carácter y los valores de los benefactores en la figura de D.Manuel Artero Berna