Con sus 675 metros de largo y 2,10 de ancho , el banco ecogeográfico, el más largo del mundo, es una de las intervenciones más populares de la EXPO. Construido con un millón y medio de piezas cerámicas quiere representar un mapa cartográfico del mundo en toda su diversidad geográfica desde el mar hasta el desierto. Las teselas fueron fabricadas en China y se ensamblaron en el mismo frente fluvial de la EXPO. La financiación del banco alcanza el millón de euros en material y 250.000 más por el componente artístico.

Con capacidad para mil espectadores, se ilumina por las noches como en los muelles permitiendo admirar los espectáculos (en especial el ICEBERG). Por el día es un gran mirador con sombra que proporcionan los árboles de los sotos del río. Tras la muestra, la obra quedará integrada en el museo abierto de la ribera

El escultor aragonés  explicó que Gaudí fue su inspiración: “El punto de partida fue el banco de Gaudí, que es también de cerámica y que tiene un discurso. El de Gaudí habla de la Iliada de Homero, el nuestro está al servicio del paisaje. La inspiración narrativa y conceptual , sin embargo, es la cartografía antigua. Desde niño me ha encantado la construcción del mundo a través de los mapas”

El autor añade  que el banco posee las dos facetas: banco y obra de arte : “Posee las dos facetas. Nadie tiene por qué entender su función artística para sentarse en él y disfrutar del paisaje porque su objetivo es funcional. Además supone una frontera entre el Ebro y su recinto”.Para Isidro  Ferrer el banco está diseñado al servicio del río y así pues, dibuja también sus curvas. Según el artista : “ en otro espacio de la ciudad tendría otro sentido y otras dimensiones”

Francisco Pellicer, director general de contenidos de la muestra, explicó en la presentación de la obra que en  este banco ecogeográfico” se grafía la relación de los paisajes con el agua, identificando paisajes”. Joan Roig , responsable igualmente de esta intervención artística comentó a la prensa que : “necesitábamos un elemento que uniera y separara a la vez la explanada de la arquitectura efímera de la EXPO, que hiciera de frontera y filtro entre las plazas temáticas y el río”

El diseñador (Madrid, 1963) afincado en Huesca desde 1996 compagina distintos proyectos editoriales con la creación de cartelería y publicidad habiendo recibido el Premio Nacional de Diseño  en 2002 y en el 2006 el Premio Nacional de Ilustración.