La obra se sitúa en el parque del río Ripoll , fue realizada por el escultor Ferrán Capdevila e inaugurada el 12 de julio de 2006.

Con esta obra abstracta, el Ayuntamiento quiere rendir homenaje al espíritu de superación de los habitantes de la ciudad después de las riadas del año 1962.

La escultura, realizada en acero corten, alcanza los 12 metros de altura y pesa 7 toneladas.

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