A LOS LIBERTADORES SOVIÉTICOS

Riga ( Letonia )

 

 

Comentario de la obra: 

La capital de Letonia celebró el 40 aniversario de la victoria soviética sobre los nazis en el año 1985 con la inauguración de un colosal memorial a los soldados que participaron en la liberación de Letonia. Fueron varios los escultores que trabajaron en el mismo: L. Bukovsky, A. Gulbis, A. Bugaev y E. Balins

El memorial fue instalado junto al Parque de la Victoria, un contrapunto al monumento de la Libertad que los nacionalistas letones habían convertido en símbolo de su lucha independentista.

El memorial se erige espectacularmente junto a las aguas de un pequeño lago artificial. El eje principal del monumento es un obelisco de 79 metros formado por cinco estrellas soviéticas que se elevan hacia el cielo, simbolizando cada una de ellas un año de la guerra. A sus pies se encuentran dos grupos escultóricos.

El primero, llamado “Los Libertadores” muestra a un grupo de tres soldados del Ejército Rojo en actitud idealista. Este grupo se encuentra mirando al obelisco y parece ofrecerse a la otra escultura, una gran “Madre Patria” envuelta entre banderas.

El memorial incluía originalmente la siguiente inscripción ” A los Libertadores de la Letonia Soviética 1941 – 1945″

Conocido por algunos habitantes de Riga, como el Dedo de Moscú, el tardío memorial levantado en honor del Ejército Rojo, se convirtió desde su inauguración en 1985 en un permanente objeto de discordia.

La razón hay que encontrarla en que hasta ese momento, el principal monumento de Riga era el Monumento a la Libertad, una construcción de 1935 que fue levantada para simbolizar la independencia de Letonia y que al finalizar la guerra se reconvirtió en memorial soviético con escaso éxito, ya que siguió siendo usando como símbolo por los  movimientos independentistas.

Así que en 1985, en pleno auge de las peticiones independentistas bálticas, los nacionalistas letones vieron la construcción del nuevo monumento como una provocación y una reafirmación de la ocupación y el poder soviético en Letonia. Por su parte, los comunistas y la importante población de origen étnico ruso, vio como un acto de justicia que la capital contara aunque fuera tarde, con un monumento a los que dieron su vida contra el invasor nazi.

El papel de Letonia en la II Guerra Mundial fue especialmente complicado ya que muchos letones participaron activamente (enrolados a la fuerza o voluntariamente) en el ejército nazi, mientras que otros tantos lo hicieron en el Ejército Rojo.

No es de extrañar, que en el 2007 un aparatoso atentado de grupos ultras letones, estuviera a punto de llevarse el monumento por delante, el cual continúa en pie entre continuos rumores de demolición.

 

Agradecimientos:

- Para Carlos Borao que me envió las imágenes de la obra